
Be still and know.
Dr. Roland E. Becker
Terapia biodinámica craneosacral
La biodinámica craneosacral es una terapia manual, procedente de la osteopatía, extremamente suave pero muy profunda, que favorece el reequilibrio del sistema corporal y la liberación de las restricciones somáticas o emocionales que pueden limitar nuestra expresión completa de salud.
Trabajando con los fluidos del sistema nervioso central y del tejido conectivo, ayuda al organismo a recuperar su funcionalidad natural y realinearse con su capacidad intrínseca de auto-curación, a la vez que se le acompaña hacia una mayor conciencia y un contacto más íntimo con su propio proceso vital.
Al ser un tipo de trabajo tan respetuoso con los ritmos fisiológicos expresados por el cuerpo, es completamente seguro y por eso apropiado para personas de todas las edades, desde ancianos hasta niños y bebés, así como durante las fases pre y perinatal, después de una operación, un accidente o en condiciones de fragilidad o cambio psico-emocional.
¿Cuándo nos puede ayudar la terapia biodinámica craneosacral?
Para restablecer la salud, tratándose de una terapia orientada a todo el cuerpo, puede ayudar a personas que se encuentren en prácticamente cualquier estado físico y emocional, aumentando su vitalidad y permitiendo que el cuerpo utilice sus propios procesos de autocuración.
Algunas de las condiciones que se pueden beneficiar de la terapia son: alergias, artritis, asma, dolores de espalda y traumas del aparato locomotor, post-operatorio dental, traumas de nacimiento, trastornos óseos y articulares, fatiga crónica y agotamiento, ataques de pánico, depresión, problemas digestivos, dolor de cabeza y migrañas, trastornos hormonales, hiperactividad, insomnio, dificultad de aprendizaje, dolores menstruales.
Para mejorar la salud, cuando no nos encontramos al 100% de nuestro máximo rendimiento o tenemos malestares físicos o anímicos difíciles de explicar, a menudo un ciclo de sesiones de terapia nos ayuda a recuperar la vitalidad, mejorar sintomatologías y modular la respuesta de nuestro organismo frente al estrés.
Para mantener la salud, porque no hace falta sufrir ninguna enfermedad para disfrutar los beneficios de la terapia craneosacral. De la misma manera que una buena alimentación y el ejercicio físico, la continuidad en el tratamiento (por ejemplo cada dos meses) nos ayudará a mantenernos sanos y vitales.